Desde comienzos del siglo XX nuestro país ha dado muestras de manejar una economía inestable infundada en la renta petrolera.
En Venezuela se necesita de la renta producida por el petroleo para exportar toda una serie de artículos sustanciales para poder sostener una economía dependiente.
No existe en Latinoamerica un país que tenga características tan profundas de economía rentista como Venezuela, especialmente desde que el petroleo surgió como factor determinante de nuestro proceso económico.
El reto a hacerle frente para el desarrollo del pais consiste en promover un esfuerzo concentrado y a largo plazo, que apoyado en los ingresos petroleros impulse la diversificación de nuestra economía, transformando los valores propios del capitalismo rentista, lo cual tiene que ver con el cambio de la estructura social que permita modificar el comportamiento toxico de algunos sectores de la población. Este es el camino, sobre las bases del esfuerzo, para incrementar la productividad y competitividad en los mercados globales.
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